Reencontrarse de nuevo con Lisboa siempre es algo apetecible.
La ciudad te recibe con los brazos abiertos nada más atravesar el puente 25 de abril sobre la desembocadura del río Tajo que parece fundirse a lo lejos en el océano.
Ya habíamos estado aquí un par de veces, hace ya algunos años.
Pero siempre se descubre algo nuevo , algo que quedó sin ver cuando los niños eran muy pequeños y te frenaban en las ansias por ver una ciudad nueva.
Nos gusta Portugal.
Este año la cosa ha sido algo más especial. Lo hemos disfrutado mucho en familia ........ porque además estas vacaciones han sido compartidas con mis sobrinas y claro , la cosa es más divertida si se va con primos ¿ o no ?
Nos gusta hacer a los niños partícipes de lo que ven sus ojos por primera vez...... de los lugares, del origen de las cosas, de las costumbres en otros sitios.
Por eso , con mapa en mano , nosotros los mayores y ellos ......adolescentes.... fuimos poco a poco adentrándonos en la ciudad .......
Llegando a sus plazas con sus tranvías.....
.......que luego se nos hicieron conocidas........
........ levantábamos la vista para ver esas preciosas fachadas tan características de azulejos......
..... y recorrimos justos sus alrededores.
Como el Cabo da Roca, el más occidental del todo el continente europeo y en el que el aire nos llevaba y el frío , de repente nos puso los pelos de punta.
O el precioso Palacio da Pena, que parecía de cuento y al que llegamos andando a través de un camino que te descubría los parajes de jardines y bosques.
Y Cascais , donde las grandes casas nos llamaban la atención y el turismo se hacía evidente.
Por supuesto la Boca do Inferno, con sus acantilados y las vistas a un inmenso océano Altlántico que se perdía en el horizonte. Lástima que no pudiéramos ver la salida espectacular del agua que entra como una bocanada y sale expulsada hacia arriba entre las rocas de una especie de cueva........ Habrá que ir en invierno .
Pensaréis que entre todas estas visitas turísticas , no dejé de ir a alguna tienda de esas que nos gustan . Pues no, esta vez sólo llevaba un par de ellas apuntadas que os mostraré en otro artículo y por supuesto acudir un sábado a la Feira da Ladra , el rastro lisboeta en el barrio Alfama.
Debo decir que obviamente la crisis también se nota aquí. Y los carteles anunciando gangas por 1 o 2 euros eran fáciles de ver.
Aunque a veces también había alguna tienda tipo anticuario que sacaba algunos trastitos que no eran asequibles.
Mi vista se centró en algunos puestos de ropa antigua de casa.
Desde luego el regateo , que creo que no se me da mal, era la " moneda de cambio " entre vendedor y comprador.
A mí me da más resultado preguntar cuánto vale un pequeño de lote de cosas ( seleccionadas ) que de forma individual.
Es curioso porque suelen coger el " burruño" de tapetes, restos de puntilla o pañuelos en la mano, mirarlo y a ojo , echarle un valor.
De entre la maleta más pequeña con paños de ganchillo saqué algunos tapetes y tanto estuve allí revolviendo , y preguntando a la mujer ( verdadera especialista de cada cada clase de bordado y tipo de ganchillo ) que al final , me llevé seis piezas impecables por quince euros.
Y aquí están mis tesoritos de los cuales sólo he tenido que lavar tres de ellos. La ciudad te recibe con los brazos abiertos nada más atravesar el puente 25 de abril sobre la desembocadura del río Tajo que parece fundirse a lo lejos en el océano.
Ya habíamos estado aquí un par de veces, hace ya algunos años.
Pero siempre se descubre algo nuevo , algo que quedó sin ver cuando los niños eran muy pequeños y te frenaban en las ansias por ver una ciudad nueva.
Nos gusta Portugal.
Este año la cosa ha sido algo más especial. Lo hemos disfrutado mucho en familia ........ porque además estas vacaciones han sido compartidas con mis sobrinas y claro , la cosa es más divertida si se va con primos ¿ o no ?
Nos gusta hacer a los niños partícipes de lo que ven sus ojos por primera vez...... de los lugares, del origen de las cosas, de las costumbres en otros sitios.
Por eso , con mapa en mano , nosotros los mayores y ellos ......adolescentes.... fuimos poco a poco adentrándonos en la ciudad .......
Llegando a sus plazas con sus tranvías.....
.......que luego se nos hicieron conocidas........
........ levantábamos la vista para ver esas preciosas fachadas tan características de azulejos......
..... y recorrimos justos sus alrededores.
Como el Cabo da Roca, el más occidental del todo el continente europeo y en el que el aire nos llevaba y el frío , de repente nos puso los pelos de punta.
O el precioso Palacio da Pena, que parecía de cuento y al que llegamos andando a través de un camino que te descubría los parajes de jardines y bosques.
Y Cascais , donde las grandes casas nos llamaban la atención y el turismo se hacía evidente.
Por supuesto la Boca do Inferno, con sus acantilados y las vistas a un inmenso océano Altlántico que se perdía en el horizonte. Lástima que no pudiéramos ver la salida espectacular del agua que entra como una bocanada y sale expulsada hacia arriba entre las rocas de una especie de cueva........ Habrá que ir en invierno .
Por supuesto las tardes estuvieron llenas de juego, de paseos por la playa con una extensa orilla cuando la marea bajaba , de volar la cometa con el constante viento que disfrutaban los surfistas......
La verdad es que cuando vuelves a casa y revisas las fotos , te trasladas rápidamente allí ...... como a esta playa de Troia, al lado de Setúbal , que parecía paradisiaca y donde el sonido del agua sólo era un rumor tranquilo.......
Pensaréis que entre todas estas visitas turísticas , no dejé de ir a alguna tienda de esas que nos gustan . Pues no, esta vez sólo llevaba un par de ellas apuntadas que os mostraré en otro artículo y por supuesto acudir un sábado a la Feira da Ladra , el rastro lisboeta en el barrio Alfama.
Debo decir que obviamente la crisis también se nota aquí. Y los carteles anunciando gangas por 1 o 2 euros eran fáciles de ver.
Aunque a veces también había alguna tienda tipo anticuario que sacaba algunos trastitos que no eran asequibles.
Mi vista se centró en algunos puestos de ropa antigua de casa.
Desde luego el regateo , que creo que no se me da mal, era la " moneda de cambio " entre vendedor y comprador.
A mí me da más resultado preguntar cuánto vale un pequeño de lote de cosas ( seleccionadas ) que de forma individual.
Es curioso porque suelen coger el " burruño" de tapetes, restos de puntilla o pañuelos en la mano, mirarlo y a ojo , echarle un valor.
De entre la maleta más pequeña con paños de ganchillo saqué algunos tapetes y tanto estuve allí revolviendo , y preguntando a la mujer ( verdadera especialista de cada cada clase de bordado y tipo de ganchillo ) que al final , me llevé seis piezas impecables por quince euros.
El pañuelo con la puntilla en rosita me pareció muy delicado , es como de muselina y el tapete en dos colores muy " retro" para mi habitación " vintage"...
... al igual que este pañito bordado ¿ no te parece ?
La percha fue otra ganga, 50 cts, lástima que sólo estuviera ésta.
La toalla bordada en tela similar a sábana fue un hallazgo que sobresalía por el tamaño entre un barullo de puntillas acrílicas.
Y no te lo pierdas, todas las ondas del borde están hechas de ganchillo finito. Aquí tuve que regatearle al hombre que me pedía 10 euros por ella. Al final incluí en el lote alguna cosilla más y se vino a casa, je, je.
Y aquí van los tapetitos hechos a mano que os contaba antes. En mi vida haré algo yo así con un hilo tan fino. Lástima que las fotos no sean tangibles......
La delicadeza del cuello blanco es espectacular , al igual que el pañuelito redondo , la telita del centro está un pelín dañada pero todo el encaje es divino y super chiquitito.
Éste de los piquitos parece de encaje. Es super sencillo pero me parece muy bonito .... y el color también.
No había visto nunca este tipo de modelo. ¿ A que es bonito y original ?
Fíjate en la tirita que une el círculo central con el resto , es una cadeneta a la que luego se le ha hecho un punto bajo minúsculo.
Desde luego vaya manos la que lo hizo ¡ y vaya vista !
Éste me parece más común pero debe estar hecho con una aguja con apenas cabeza.
Perfecto
Y dejo para el final el caramelo , lo que más me ha gustado de todo.
Entre varias toallas y sábanas bordadas, super colocadas, blancas , relucientes ..... destacaba este gran tapete doblado que llamaba la atención por el intríngulis de su trabajo. Menudos calados.
Fue uno de los primeros puestos que vi esa mañana. Pensé en que aún me quedaban cosas por ver y que tenía que decidir en qué gastaba en poquito dinero que llevaba ahorrado y destinado a este mercadillo..... Surgió la indecisión....... ¿ y si luego vengo y lo han vendido ? ¿ Y si encuentro otra cosa que me guste más ?.....
La experiencia sirve de algo y como no es la primera vez que me he arrepentido, pensé " más vale pájaro en mano que ciento volando " y tras una charla con la mujercica, una abuelilla bien arreglada, que parecía estar al frente de un puesto cuidado y no destartalado como el resto ....... me lo dejó en........ atención...... ¡¡ocho euritos !!........
De verdad que es una maravilla. Está impecable, como nuevo. Si alguna entiende de bordado podrá apreciar estos detalles , porque yo creo que ya no se ven cosas así hechas a mano como ésta, en la que ves las puntaditas con la aguja y los remates perfectos....Y esos calados que quitan el aire.
Bonito ¿ verdad ?
En mi blog Alterado iré compartiendo mi cuaderno de viaje como ya va siendo habitual.
Por último y si has conseguido leer hasta aquí ( enhorabuena porque este ha sido un artículo muuy largo después de casi mes y medio de ausencia ) te dejo este video que he montado como ya he hecho en otros viajes.