viernes, junio 23, 2017

Tapetito de primavera.



A veces  todo puede empezar por un  simple detalle. En este caso el pistoletazo de salida fue un biés que compré de lunares. Me gustó y no hubo más que decidir..... ya llegaría el momento de emplearlo.





Teniendo en cuenta que llevé un metro de muestra, busqué un bloque para hacer un pequeño tapete, que también me sirviera de para probar algo nuevo.







Así que  eché mano de alguna de las fotos que guardo para " futuras inspiraciones" con un suelo que perfectamente podía adecuarse al patchwork.
Busqué telas entre las que tenía, combiné y con algunos troqueles de Sizzix, corté  triángulos y trapecios.











Primero cosí los triángulos y trapecios alternando las dos telas.Una vez tenidos los rectángulos, cosí los bloques.








Corté  unos bordes en vichi azul y añadí una puntilla.



De nuevo con uno de los troqueles de flores de Sizzix, corté en otras dos telas distintas  colocando entretela doble que deja la flor pegada a la tela con el calor de la plancha.
Apliqué por el borde de cada una con hilo rosa y  luego acolché con hilo perlé del nº 8 en rosa, con una guata  finita colocada  debajo previamente.









Luego sólo fue añadir el biés rosita, rematar a mano ......





..... ¡ Y listo!




¡ Espero que os haya gustado !
Es una labor sencilla, resultona y rápida.




viernes, junio 02, 2017

Unos cojines en pastel


Después de estar un montón de tiempo sin tocar la máquina de coser, por fin he vuelto para coser algunos cojines y  dar un toque primaveral a nuestro dormitorio.
Estos son los dos primeros.



Aprovechando el relleno que ya tenía de unos que compré en Primark en terciopelo blanco y que suelo colocar en invierno, he cortado la tela para este par con forma rectangular.





Eso sí, para adecuarlos a mi estilo y con el objetivo en mente siempre de usar lo que tengo, he aprovechado una puntilla antigua que en algún momento ya os enseñé de un viaje que hicimos a Valencia.  Están cosidas de forma vertical en la parte delantera.
Sobre ella una piculina  muy pero que muy estrechita también antigua.
En los bordes de los cojines añadí una cinta rizada en seda que mi madre me regaló en un rollo de varios metros. Tiene un suave tono crema que combina fenomenal con cualquier cosa.
¿ Qué os parece?






Para el cierre he optado por una cremallera en un suave rosa.





Quería la misma tela para la parte delantera y la trasera y como  era de un metro y  medio de ancha, he tenido suficiente con sólo medio metro para los dos cojines.




Como veis son bastante sencillos y creo que han quedado muy dulces.
La idea es hacer algunos más en otras medidas y que puedan combinar unos con otros.




Sin duda  la primavera es mi estación favorita. Tiene algo que invita a ser creativa ¿ no te parece ?